Tipos de frustración en un mundo de gratificación inmediata. 

¿Alguna vez tu hijo/a ha tenido una pataleta porque le has dicho que no a algo tan lógico como, por ejemplo, no puedes usar un cuchillo para jugar?

Entre los 2-3 años es normal que los niños y niñas tengan frustración, ya que aún están en proceso de aprendizaje del NO, es más, es el momento en el que poner a prueba a papá y mamá y saber hasta dónde pueden llegar.

En este artículo, os vamos a ayudar a identificar cuándo esa frustración es o no adaptativa y a saber identificar los tipos que existen.

¡Allá vamos!

La frustración es un estado emocional que se desencadena ante acontecimientos que involucran la reducción o supresión inesperada de reforzadores apetitivos. Está muy ligada a las expectativas que nos hemos creado sobre una situación y por esa razón, es importante también trabajar en ello.

Además, está relacionada a algo importante que debemos tener en cuenta que es algo que está sucediendo hoy en día que es la GRATIFICACIÓN INMEDIATA.

Existen estudios que demuestran que actualmente la dificultad de los videojuegos está disminuyendo debido a la falta de esfuerzo por parte de los jugadores a seguir intentándolo, además de realizar metas y objetivos más a corto plazo para que sientan ese refuerzo en el menor tiempo posible.

La gratificación inmediata unida a la falsa educación positiva donde impedimos que los niños tengan emociones adaptativas como la tristeza, ira o frustración – cuando todas ellas contribuyen al desarrollo normal y a la inteligencia emocional de los niños y niñas – hacen que la gestión emocional se convierta en un problema a trabajar años posteriores.

A continuación os explicamos los tipos de frustración a detectar en los niños y niñas y unos pequeños tips para trabajar en ello:

  • El primer tipo de frustración surge de aquellos peques que son muy imaginativos y creativos y piensan que aquello que están pensando e imaginando va a suceder. Cuando no sucede no saben aceptarlo, esto se debe además a que en la infancia tenemos un pensamiento egocéntrico por lo que no tienen en cuenta ni el ambiente, ni lo que piensan los demás.Sería importante trabajar la empatía, la anticipación, la explicación de la situación, entorno y darse cuenta que no es la única persona que está participando.
  • La sobreprotección como causa de la frustración. El refuerzo cuando hacen algo mal, el no castigo o la falta de límites hacen que los niños y niñas no estén expuestos a la realidad de que no siempre van a poder conseguir aquello que deseen.Exponer de manera gradual a la frustración de no conseguir lo que quieren siempre y a dar luz a la satisfacción interna de haberlo intentado y de esforzarse pese a no obtener exactamente lo que desea.
  • La autoestima baja. Su valía está a niveles muy bajo, por lo que cuando determinadas actividades se te dan mal, hay una tendencia a sobrecompensar y agarrar ciertos éxitos como si su autoestima dependiera de ello, por lo que el perder o no conseguir algo les afecta de una forma intensa y no son capaces de regular ese sentimiento de inutilidad. Los éxitos los celebran en exceso.Conocer porqué hay baja autoestima, trabajar sobre ella y en la empatía. Darle el valor que tiene a la actividad que estemos realizando.
  • Problemas de impulsividad. No son capaces de mantener el autocontrol ni el razonamiento de causa-consecuencia, por lo que en momentos de frustración no pueden controlar sus sentimientos de ira y tristeza.Trabajar el autocontrol y la atención en el contexto y emociones internas. La planificación y el anticiparse son estrategias que ayudan al control.

Existen muchos juegos y actividades con los que interactuar con nuestros hijos e hijas, cualquier dinámica relacionada con la espera y juegos competitivos como el parchís, las cartas o el dominó pueden ser buenas oportunidades para explicarles que no siempre pueden ganar, haciendo ver que hay otras personas que están jugando a la vez. La espera, además, es conveniente para eliminar la gratificación inmediata y recordar que ha sido un momento divertido con la familia se gane o pierda.

Bibliografía

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  • Tarrés, S., & Méndez, A. (2021, 23 febrero). Por qué no hay que dejar ganar a los niños en los juegos para evitar su frustración. Guiainfantil.com. https://www.guiainfantil.com/articulos/educacion/conducta/hay-que-dejar-ganar-a-los-ninos-en-los-juegos-para-evitar-su-frustracion/